En tierras bajas (Herta Müller)
Especial mención merece a mi parecer un brevísimo relato, El baño suabo, en el que cada uno de los miembros de una familia va entrando en la bañera, respetando escrupulosamente los turnos, sin cambiar de agua, aunque obviamente el agua sí va cambiando con cada nuevo visitante. La naturalidad con la que trata y refleja lo cotidiano de la miseria resulta estremecedor. Y lo descriptivo del momento es espeluznante, de verdad.
En líneas generales, la ficción y la realidad se entremezclan con tal maestría en la boca de la infancia, que consigue no restar crudeza al mundo hostil que describe. Una crónica de un pueblo, una reflexión profunda sobre la patria, la censura, el castigo como herramienta de control y la opresión como hilo conductor de unas vidas que cuesta imaginar en un mundo ya tan lejano, al menos para los más jóvenes en tierras occidentales.
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