Un paseo invernal (Henry David Thoreau)
Además de numerosas observaciones acerca de diversos fenómenos de la naturaleza, Thoreau se hace constantemente preguntas para poner de relieve nuestra relación con ella. Así, entre muchas otras, llega a concluir que si nuestra vida fuera más conforme a la naturaleza, quizás la llegaríamos a considerar nuestra benefactora y amiga, como hacen las plantas y los mamíferos. Si el bueno de Thoreau levantara la cabeza (murió en 1862), quizás volvería a enterrarla voluntariamente y al instante.
Los bosques toman un papel protagonista en este relato del escritor estadounidense. Y no solo por lo que aportan al funcionamiento sistémico, sino también al propio ser humano, llegando a aseverar que nuestras reflexiones adquieren una riqueza y variedad muy superiores a las que ostentan cuando estamos inmersos en la vida de las ciudades.
En definitiva, un relato bello y evocador, que pone de manifiesto la manera de encarar la vida de su autor. Algo en lo que profundiza en Caminar, el otro relato que compone este volumen editado por Errata Naturae. En él, Thoreau se rinde a las bondades de caminar en plena naturaleza, con un alegato definitivo a la vida salvaje, la manera de ser verdaderamente libres, lejos de las plazas, jardines y avenidas en que solemos estar encerrados en nuestro día a día.
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